Descubrir el poder renovador de la naturaleza mediante el ejercicio al aire libre es una estrategia efectiva para mejorar la salud mental. Además de los beneficios físicos que aportan las actividades al exterior, ejercitarse en espacios naturales puede generar sensaciones de calma, estimular la creatividad y fortalecer el estado de ánimo. El contacto con el aire fresco y los ambientes abiertos es una herramienta poderosa para quienes buscan reducir el estrés diario y encontrar mayor equilibrio emocional. Este artículo explora las profundas conexiones entre la actividad física, el entorno natural y una mente más sana.